viernes, 20 de enero de 2017

LOS ZAPATOS DE MURANO: MIGUEL FERNÁNDEZ PACHECO


Hay historias eternas...
Cuentos que nos acompañan desde que nos dormíamos escuchándolos. Pero nos gusta que nos los sigan contando. Es el antídoto del tiempo; todo pasa, pero aquellos cuentos que nos ilusionaron una vez, esos cuentos nunca envejecen. Pienso que no hay que entender que el tiempo te aleja de la juventud, porque aunque alguien dijo una vez que nunca se es tan feliz como cuando eres un niño, cada etapa de la vida es un instante diferente, una oportunidad única para encontrar la felicidad, y lo que con diez años te parecía una montaña infranqueable, ahora con cuarenta y tantos no es más que un camino soleado cuesta abajo. No, no soy un niño, y leyendo Los zapatos Murano he comprendido que el tiempo nos permite adivinar, en los cuentos de siempre, una lectura nueva, tan fascinante como entonces y con la suerte de volverte a sorprender.

No voy a contar nada del argumento de esta novela. Sí diré que me parece perfecta en su contenido histórico y en su contextualización... Todo ello se delata con un lenguaje ágil en la narración y lleno de matices de la época en la que se recrean lo acontecimientos.  Amor, fantasía, lucha de clases, pequeñas dosis de maniqueísmo... con el aroma de Venecia, que siempre es de agradecer el poder recordarla... Saber que nunca se deja de ser joven porque te sigue emocionando el mismo cuento de siempre... eso sí, contado de otra forma. Ah, este libro de Miguel Fernández Pacheco fue Premio Lazarillo

 

1 comentario:

  1. Muy bonito lo que nos cuentas del libro, como bien dices, cada etapa es un instante diferente y una oportunidad única. Un abrazo

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